lunes, 14 de marzo de 2016

folklore y cultura

Folklore es una palabra de la lengua inglesa que también se utiliza en nuestro idioma, aunque, de acuerdo al diccionario de la Real Academia Española (RAE), se escribe folclore. En ocasiones, puede aparecer escrita como folcklore, folclor o folklor. El término hace referencia al conjunto de las creencias, prácticas y costumbres que son tradicionales de un pueblo o cultura. Se conoce como folklore, además, a la disciplina que estudia estas materias.

El folklore incluye los bailes, la música, las leyendas, los cuentos, las artesanías y las supersticiones de la cultura local, entre otros factores. Se trata de tradiciones compartidas por la población y que suelen transmitirse, con el paso del tiempo, de generación en generación.

Folklore: Es una palabra de Origen Inglés. Compuesto de la antiguas expresiones Sajonas Folk, que significa Pueblo y Lore, que quiere decir Saber. Esta palabra se utilizo por primera vez en Londres, Gran Bretaña, el 22 de Agosto de el año 1846, se publicó en la revista the athaeneum y quien la publicó lo fue William John Toms; Este señor pedía que se recogieran con el proposito de que sean aportadas a todas las generaciones futuras los usos de: costumbres, ceremonias, superticiones, baladas, proverbios, palabras, cuentos, canciones, bailes, creencias,etc. osea lo que el llamaba el saber tradicional del pueblo. Esta palabra aparece en España en el  año 1881.

En mexico en el año1890. Es decir que en la Republica Dominicana fue conocido primero que en los paises antes mencionado.

La cultura es el conjunto de formas y expresiones que caracterizarán en el tiempo a una sociedad determinada. Por el conjunto de formas y expresiones se entiende e incluye a las costumbres, creencias, prácticas comunes, reglas, normas, códigos, vestimenta, religión, rituales y maneras de ser que predominan en el común de la gente que la integra. El término cultura tiene un significado muy amplio y con múltiples acepciones. Lo mismo sucede con palabras como ciencia, conocimiento o fe, vocablos concretos con diferentes valoraciones y sentidos.

Al mencionar la palabra cultura se está haciendo alusión a un conjunto amplio de conocimientos referidos a un ámbito concreto. Se puede hablar de cultura desde un enfoque personal, gremial o colectivo y también como idea referida a una globalidad de valores compartidos por una comunidad.

LA CULTURA UN FENÓMENO

La verdad es que la cultura es un fenómeno, es el único sector de todas las entidades que conforman un sistema tanto gubernamental como en lo social, que reúne a todos los sectores socio-económicos, culturales y étnicos en uno solo. El único sector que sin recursos gesta y hace florecer lo más bello de la cultura de un país. Es el único sector que a pesar de lograr la unión de todos los sectores económicos y hacerlos enriquecer, no genera ingresos sino gastos, pero aún así la cultura sobrevive para brindar a todos quienes la usan para sus propósitos burocráticos, filantrópicos, políticos y sociales. ¡La Cultura es un Fenómeno!

LO FENÓMENO DE LA CULTURA

La cultura se convirtió en una alternativa muy interesante, para quienes necesitan liderar y conseguir público; controlar y manejar de los recursos; comprar procesos culturales y aspiraciones de todos aquellos que sin cultura llegan a manejar el sector cultural de un país, regiones, ciudades y pueblos, donde a su vez se conglomeran los funcionarios más corruptos que manipulan los proyectos culturales de todos los verdaderos protagonistas que hacen la cultura, alcanzando el beneficio tanto personal del funcionario, como de sus jefes inmediatos, logrando propósitos políticos manejados con los recursos de la cultura, por lo general para llegar a los sectores más vulnerables y necesitados en todos los rincones de una nación, pero acallando a quienes con cultura dejan el legado, para que otros sigan vanagloriándose de la cultura que los cultos han brindado.

Parte de los recursos de las ciudades, para justificar y poder alcanzar aspiraciones burocráticas y políticas los direccionan por la vía cultural, creando proyectos bajo “misiones culturales”, para así captar capitales y con ellos sobornar logrando por otras instancias objetivos burocráticos a sabiendas que es el sector más agradecido, pero que han logrado mantenerlo en la completa miseria y con la necesidad a flor de piel, para así seguir manipulando los sueños e ideales de los protagonistas que verdaderamente gestan cultura. Esto se convierte en lo fenómeno de todo proceso cultural, para poder gozar de un verdadero espectáculo revestido de corrupción y sumisión.

Suficiente es que la cultura de todos los pueblos haya sido arrancada, cambiada, distorsionada, robada y sublevada matando con armas y puñales durante miles de años, para que se siga permitiendo en épocas donde todos tienen las mismas oportunidades y posibilidades de unirse como nunca antes en la historia de las civilizaciones modernas, que ni armas y puñales pudieron hacerlo. Ahora, dejando la Cultura a manos de quienes siguen utilizando la peor arma, “La Lengua”, que ha destruido culturas y naciones completas; ideales y conocimientos enteros; sueños y legados incalculables, por quienes siguen distorsionando la buena imagen y utilizando los recursos que genera la cultura, para repartirlos entre los fenómenos que direccionan el sector cultural. Fenómenos que han ocasionado la pérdida de los valores culturales y éticos que afecta directamente al resto de los sectores socio-económicos y educativos de un país, por falta de Cultura.

La cultura de pueblos, como instrumento de transformación social en su relación Hombre - Sociedad - Naturaleza

En el devenir de los pueblos, la cultura, es un proceso de transformación social presente desde tiempos históricos, visto como manifestación que identifica una sociedad y su correspondiente comunicación entre el hombre y su entorno. Por otra parte, permite un acercamiento con nosotros mismos para reconocernos y saber cuál es nuestro origen, es decir, quiénes somos.

Dicho proceso cultural, ha variado de un pueblo a otro desde tiempos remotos, hasta nuestros días, pero, haciéndose siempre presente en la relación hombre con cada elemento de nuestro pueblo, siendo el lenguaje una condición necesaria de cultura, puesto que, el individuo adquiere su cultura por medio de la interacción con su grupo. Es así, como la misma es vista como:"…la cultura queda entendida como criterio abarcador en el cual no se establece diferenciación entre expresiones materiales -producción de bienes u objetos culturales-, y espirituales, mensajes intelectuales de cultura" (Miliani, 2008:36).

En tal sentido, cada individuo transmite y expresa ideas de acuerdo a la carga cultural donde este inmerso, desde una palabra, una obra artística, una fotografía, una escultura produciéndose una constante comunicación con su mundo, por consiguiente, el hombre actúa como creador de su cultura.

De igual forma, este proceso de cultura no trabaja de manera aislada, su entorno esta rodeado de factores que se interrelacionan entre si, creando un campo social en tres elementos fundamentales: "…los factores a considerar abarcan al emisor del mensaje cultural –tanto el productor o creador de bienes de cultura, como el transmisor -; el producto cultural como mensaje y el receptor de cultura, individual o social" (Miliani, 2008:35).

En toda dimensión cultural, las formas de pensamiento, del lenguaje y de acción humana adquieren un valor universal desde el punto de vista histórico, a su vez adquiere un sentido Nacional y Regional, puesto que también se produce en una sociedad de determinado país o región y en un tiempo determinado. Aquí el hombre, no se ve como un sujeto pasivo sino como constructor de sí mismo, un participante consciente en el proceso de transformación de la sociedad.

Es necesario resaltar, que el productor de cultura, determinada en cualquier contexto donde se ubique, debe proveer la esencia cultural que legitime su cualidad identitaria con el medio social, es decir, que su mensaje sea transmitido no cayendo en la comercialización ni en la especulación del mismo. Esto hace referencia a:

El intelectual profesionalizado obtiene una libertad, una independencia material para la realización de su trabajo creador: es decir, ya no depende de su papel funcionario de una sociedad. Pero se esclaviza económicamente a las fluctuaciones y los juegos de la libre empresa. En tal sentido su trabajo se aliena. Y su éxito comercial ya no depende tanto de los valores propios de su obra cultural, como de que esa obra interese a los propietarios del mercado cultural, quienes tienen en sus manos el promoverlo o segregarlo. Su función comunicativa ante la sociedad queda cercenada o expuesta al riesgo de cualquier artículo en la sociedad de consumo (Miliani, 2008:26).

A pesar de esto, el productor de cultura no sólo se ve amenazado por la comercialización de su producto cultural, sino que también sea silenciado y removido, si éste asume una actitud crítica frente a la sociedad. Aunado a esto, hacer llegar dicho producto a todos los miembros de una sociedad también implica sentidos positivos y negativos desde el punto de vista de las colectividades. El producto cultural puede ser distribuido de varias formas, por una parte: De forma materializada como es el caso de los libros, pinturas, estatuas, en este caso, se puede considerar un factor de incidencia negativa, por cuanto, son corporaciones encargadas de promocionarlo de acuerdo a sus gustos y exigencias más no en el valor ético y estético de la cultura.

Cultura estética

La Historia de la estética es una disciplina de las ciencias social es que estudia la evolución de las ideas estéticas a lo largo del tiempo.1 La estética es una rama de la filosofía que se encarga de estudiar la manera cómo el razonamiento del ser humano interpreta los estímulos sensoriales que recibe del mundo circundante. Se podría decir, así como la lógica estudia el conocimiento racional, que la estética es la ciencia que estudia el conocimiento sensible, el que adquirimos a través de los sentidos. nota 1 Entre los diversos objetos de estudio de la estética figuran la belleza o los juicios de gusto, así como las distintas maneras de interpretarlos por parte del ser humano. Por tanto, la estética está íntimamente ligada al arte y al estudio de la historia del arte, analizando los diversos estilos y periodos artísticos conforme a los diversos componentes estéticos que en ellos se encuentran. A menudo se suele denominar la estética como una «filosofía del arte».

Definición de cultura en antropológica

La antropología es el estudio generalizado de los seres humanos. En antropología, la cultura es el principal tema de investigación, además de un término cuyo significado es objeto de cierta controversia. En general, el término "cultura" refiere a los aspectos no biológicos de la fenomenología humana. En el campo de la cultura antropológica, "cultura" refiere al conjunto dinámico que forman las creencias, el conocimiento, el arte, la tecnología, la moral, las costumbres e incluso las lenguas que son inculcadas a los miembros de una comunidad.

jueves, 12 de noviembre de 2015

La etapa adulta

El desarrollo adulto se enmarcan en el importante cambio de estructura que sufre el psiquismo durante esta edad, que constituye la condición indispensable para ir consiguiendo la madurez de la personalidad que se espera del hombre conforme avanza en edad y que, trascendiendo el desarrollo biológico, exige el esfuerzo y la autoeducación como tarea que no termina nunca. Así mismo, este cambio de estructura da lugar al fenómeno paradójico dicho cambio de estructura "compensa" la tendencia biológica hacia la decadencia que se hace sentir ya después de los 30 años.
La Edad adulta temprana de los 20-21 a 30-32 años: El adulto joven ha alcanzado la plena madurez corporal y se halla en plena posesión de sus funciones psíquicas. Desde un punto de vista psicosocial, la edad adulta joven se caracteriza por la separación real e intrapsíquica de la familia de origen y el compromiso con nuevas tareas específicas. El sujeto termina por resolver la dependencia, establece la confianza en sí mismo y comienza a formular nuevos objetivos adultos que inducen nuevas estructuras destinadas a promover la estabilidad y la continuidad.
La Edad adulta media de los 30-32 a 42-44 años: La edad adulta media constituye el núcleo de la vida y debería representar la edad del adulto maduro. En ella se llega a una estabilización de todo lo que hasta ahora se encontraba en agitación, el individuo tiene que realizar en esta edad la tarea de determinarse específica y definitivamente en los aspectos fundamentales de su vida.
La Edad adulta tardía de los 42-44 a 56-68 años: La edad adulta avanzada, también llamada edad involutiva, es una época de decadencia biológica y fuertes conmociones psíquicas. De los 45 a los 50 años se presenta una notoria disposición a las llamadas crisis de inflexión de la vida. Vista en conjunto, la edad adulta tardía supone una gran prueba de confirmación de la personalidad.

VEJEZ

La conciencia universal del envejecimiento, los visibles cambios que se producen en el aspecto exterior de la persona, y la mayor incidencia de enfermedades importantes, convierten a las ideas y sentimientos sobre la decadencia de la vida en un tema relevante y a la necesidad de aceptación gradual de esa realidad en un proceso necesario para un funcionamiento sano.
El proceso de envejecimiento corporal, la muerte de los padres y de los contemporáneos, el crecimiento de los hijos, etc., enfrentan cara a cara con la realidad inevitable de la limitación del futuro y de la muerte personal. La persona tiene que adquirir la fuerza suficiente para poder superar las cargas físicas y enfrentarse serenamente con la muerte. La vejez comprende también tres periodos de edad con características diferenciadas, dentro del común denominador de una paulatina y “fisiológica” decadencia física que puede entorpecer y/o distorsionar la manifestación de unas capacidades psicosociales.
Vejez temprana de los 56-58 a 68-70 años: Se agudizan los procesos de envejecimiento comenzados después de los 45 años. Con todo, el estado de las facultades psicofísicas permite aún, por regla general, el ejercicio del trabajo profesional. Se encuentra todavía profesionalmente en condiciones de rendir al máximo ya que suple con experiencia y madurez la posible falta de movilidad y dificultad para el cambio. Desde el punto de vista psíquico es ahora cuando verdaderamente está capacitado para cargos de responsabilidad.
Vejez media senectud de los 68-70 a 80-82 años: La senectud implica la definitiva disminución y decadencia de las fuerzas psicofísicas. Los rasgos más llamativos son las limitaciones corporales –menor fuerza y movilidad y menor capacidad de los sentidos- y la disminución de las funciones psíquicas.

 Características físicas

Estos tipos de cambios son los más evidentes...basta con levantarse en la mañana y mirarse al espejo para darse cuenta del proceso de envejecimiento, de pérdida de la “juventud”, pérdida que es vivida con dolor, porque aunque el sujeto no quiera, no puede aislarse de una sociedad en que existe una sobre valoración de la juventud y de todo aquello que se le relacione (el aspecto físico, sin fuerza, torpes y lentos, desmemoriados y con un nivel de inteligencia en constante declive, que de alguna manera deben ser marginados de la sociedad. Los principales cambios observados a nivel físico en los ancianos:
Problemas de irritación sanguínea: la caja torácica se vuelve más rígida, lo que se traduce en una disminución de la capacidad respiratoria y las consecuentes fallas en el sistema respiratorio del sujeto; además, disminuye el ritmo cardíaco, aumenta la presión arterial, disminuye el suministro de sangre a todo el organismo en general debido a la disminución del volumen de contracción del corazón.
La sexualidad: las glándulas sexuales se atrofian, disminuye en las mujeres el nivel de estrógenos circulantes, con la consecuente disminución de lubricación vaginal que entorpece el acto sexual; en el hombre, se hace más difícil la erección y la eyaculación precoz se hace más frecuente.
Los sentidos: respecto al plano funcional de los procesos sensoriales, el sentido de la visión y de la audición son los que se deterioran antes, lo que significa una limitación de sus funciones. Los demás sentidos también se ven afectados, pero de manera menos intensa.
Aspectos externos o estéticos: se acentúa la canicie, la calvicie, la piel se hace más friable, lo que aumenta la cantidad de arrugas; hay cambios en la postura, lo que se traduce en una disminución en el tamaño del individuo, la fuerza muscular y la velocidad de reacción también disminuyen; se produce acumulación de tejido graso en determinados sectores del cuerpo. Se observa también atrofia muscular, caída de dientes.

Características emocionales

·        Cambios abruptos en el estado anímico
·         Disminución del interés por las actividades de la vida cotidiana
·         No lograr reconocer cambios en el comportamiento
·         No manifestar simpatía, preocupación, empatía o calidez emocional
·         Esta edad anímica inadecuada
·         Indiferencia frente a los acontecimientos o al medio ambiente

Características en el lenguaje
·       
i  Incapacidad para hablar (mutismo)
·         Disminución de la capacidad para leer o escribir
·         Dificultad para encontrar una palabra
·         Dificultad para hablar o entender el lenguaje (afasia)
·         Repetición de lo que se dice a las personas (ecolalia)
·         Reducción del vocabulario
·         Sonidos del habla débiles y sin coordinación

Características cognitivo
·         Deterioro neurológico
·         Limitaciones físicas
·         Factores psicológicos
·         Velocidad
·         Inadecuación de las tareas

·         Perdida de continuidad en la actividad intelectual



escucha música mientras investigas


miércoles, 4 de noviembre de 2015

La Lingüística

La lingüística se denomina la disciplina que se dedica al estudio del lenguaje la palabra, como tal, proviene del francés linguistique, y este a su vez de linguiste, que significa ‘lingüista’.

La lingüística tiene como objetivo el estudio, la descripción y la explicación de la lengua entendida como un sistema de signos autónomo. Como tal, es una ciencia que bien puede estudiar el lenguaje en un sentido general, enfocado en su naturaleza y en las pautas que lo rigen, o bien de manera particular, orientada al estudio de lenguas específicas. Asimismo, la lingüística aborda aspectos asociados a la evolución de la lengua y su estructura interna, entre otras cosas.

La lingüística también estudia la lengua a distintos niveles: el fonético-fonológico, el morfológico, el sintáctico, el léxico y el semántico. Asimismo, la analiza a partir de su realización en el habla mediante las disciplinas de la pragmática y de la lingüística textual.

En este sentido, hay que subrayar que actualmente en el mundo existen aproximadamente un total de 6.000 lenguas. No obstante, la Lingüística a la hora de estudiar las mismas se basa en una clasificación de aquellas que se realiza en función del origen común que puedan tener las mismas. Es decir, se ordenan en función de la familia. Así, partiendo de dicha explicación, podemos encontrar las lenguas indoeuropeas, las sinotibetanas, las afroasiáticas, las japónicas, las coreanas, las uránicas o las indopacíficas, entre otras.

De esta forma, la lingüística como ciencia hace foco en la naturaleza y las pautas que rigen al lenguaje. A diferencia de la filología, una disciplina que profundiza en la evolución histórica de las lenguas en escritos y en el contexto de la literatura y la cultura asociada, la lingüística permite descubrir el funcionamiento de una lengua en un determinado momento, para comprender su desarrollo general.

La lingüística moderna surge a partir del siglo XIX. Con la publicación póstuma de Curso de lingüística general (1916), de Ferdinand de Saussure, la lingüística se ha convertido en una ciencia integrada a la semiología. Desde ese entonces, aparece la necesidad de marcar una diferencia entre lengua (entendido como todo el sistema) y el habla (es decir, su puesta en práctica), así como también de rever la definición de signo lingüístico (recurso donde se agrupa al significado y al significante). En el siglo XXNoam Chomsky desarrolla la corriente del generativismo, que entiende a la lengua como una consecuencia del procesamiento mental del hablante y en la capacidad genética (o innata, dicho de otro modo) para incorporar y hacer uso de una determinada lengua.

Y todo ello lleva a que tampoco se pueda olvidar la figura del lingüista Simón Dik que es de origen holandés y que destaca porque forma parte de otra corriente dentro de este ámbito que nos ocupa. En concreto nos estamos refiriendo a la escuela funcionalista que se puede definir como aquella rama que establece que el lenguaje no puede ser estudiado y analizado de manera independiente, sino que hay que tener en cuenta para ello también lo que es el uso que se le da al mismo.

Este hecho trae consigo el que dentro de la escuela funcionalista, en la que Dik es una de sus máximas figuras gracias a sus ideas y trabajos como el titulado Functional Grammar, se le otorgue un gran valor a cuestiones o elementos tales como la variación lingüística o la pragmática. Campo este último que se dedica a estudiar cómo el contexto en el que se encuentre el individuo influye en la manera de interpretar el significado en cuestión del lenguaje.

El estudio de la lengua como sistema puede llevarse a cabo en distintos niveles: el fonético-fonológico (fonología y fonética),el morfológico (morfología), el sintáctico (sintaxis el léxico (lexicología y lexicografía) y el semántico (semántica).Desde el punto de vista del habla, en cambio, puede considerarse al texto como la unidad superior de comunicación y a la pragmática, que hace foco tanto en la enunciación como en el enunciado.


 VARIEDADES LINGÜÍSTICAS

Una variedad o variante lingüística es una forma específica de lengua natural, caracterizada por un conjunto de rasgos lingüísticos usados por una determinada comunidad de hablantes vinculados entre sí por relaciones sociales o geográficas.
Las variedades lingüísticas son distintas formas que adquiere una misma lengua de acuerdo al lugar en que vive el hablante (esta variedad se denomina dialecto), a su edad (esta variedad se llama cronolecto) y a su grupo social donde también influye el nivel de educación (sociolecto). Las diferencias pueden estar relacionadas con el vocabulario, la entonación, la pronunciación o la confección de expresiones; y en general se manifiestan más claramente en la oralidad que en la escritura. De esta forma, cuando escuchamos hablar a alguien, podremos suponer en qué región reside (si en la zona Metropolitana o la zona rural, por ejemplo), de qué grupo etéreo forma parte (es un niño, un adolescente, un adulto, un anciano) y qué nivel educativo tiene.
El término variedad es una forma neutral de referirse a las diferencias lingüísticas entre los hablantes de un mismo idioma. Con el uso del término variedad se pretende evitar la ambigüedad y falta de univocidad de términos como lengua o dialecto, ya que no existen criterios unívocos para decidir cuándo dos variedades deben ser consideradas como la misma lengua o dialecto, o como lenguas o dialectos diferentes.
Las variedades pueden ser distinguidas, además de por su vocabulario, por diferencias en su gramáticafonología y prosodia. Existen diversos factores de variación posible asociados a la geografía, la evolución lingüística, los factores socio lingüísticos o el registro lingüístico.
Variedades geográficas: Los cambios de este tipo pertenecen a la variación diatónica y consisten en que existen variantes en la forma de hablar una misma lengua debidas a la distancia geográfica que separa a los hablantes.  Así, por ejemplo, en España le dicen cerillas al objeto que en América se denomina fósforos.
A estos cambios de tipo geográfico se les llama dialectos (o más propiamente geolectos) y, a su estudio, dialectología. Es importante aclarar que este término no tiene ningún sentido negativo, pues, ha sido común llamar dialecto a lenguas que supuesta-mente son “simples” o “primitivas”. Hay que tener presente, ante todo, que todas las lenguas del mundo, desde el punto de vista gramatical, se encuentran en igualdad de condiciones y ninguna es más evolucionada que otra. Por eso, es ilógico afirmar que una lengua es mejor que otra.
Los dialectos son, entonces, la forma particular con la que una comunidad habla una determinada lengua. Desde este punto de vista se suele hablar del inglés británico, del inglés australiano, etc. Sin embargo, hay que tener presente que los dialectos no presentan límites geográficos precisos, sino que, al contrario, se ha visto que estos son borrosos y graduales. De ahí que se considere que los dialectos que constituyen una lengua forman un continuo sin límites precisos.
Muchos suelen decir que una lengua es un conjunto de dialectos cuyos hablantes pueden entenderse entre sí. Sin embargo, esto puede ser aproximadamente válido para el español, no parece serlo para el alemán, ya que hay dialectos de esta lengua que son ininteligibles entre sí. Por otro lado, estamos acostumbrados a hablar de lenguas escandinavas, cuando, en realidad, un hablante sueco y uno danés se pueden entender usando cada uno su propia lengua. En lo que respecta al español, tradicionalmente se ha considerado que existen dos variedades generales el español de España y el español de América.

Variedades diacrónicas: Este tipo de variación está relacionado con el cambio lingüístico, cuando se comparan textos en una misma lengua escritos en diferentes épocas se aprecian diferencias sistemáticas en la gramática, el léxico y a veces en la ortografía (frecuentemente como reflejo de cambios fonéticos). Estas diferencias son claramente crecientes a medida que se comparan textos más separados en el tiempo. A cada uno de los estadios más o menos homogéneos circunscritos a una cierta época se les denomina variedad diacrónica. Por ejemplo para el idioma español puede distinguirse el español moderno (que a su vez presenta diversidad geográfica y social), el español medio y el español antiguo.

Variedades sociales o diastráticas: Este tipo de variaciones comprenden todos los cambios del lenguaje producidos por el ambiente en que se desenvuelve el hablante. Dentro de este ámbito, interesa sobre todo el estudio de los sociolectos, los cuales se deben a factores como la clase social, la educación, la profesión, la edad, la procedencia étnica, etc. En ciertos países donde existe una jerarquía social muy clara, el sociolecto de la persona es lo que define a qué clase social pertenece. Ello supone, por supuesto, una barrera para la integración social.

Variedades situacionales: Conocidas también como variaciones diafásicas, este tipo de variantes involucra cambios en el lenguaje a partir de la situación en que se encuentra el hablante. Como se sabe, no hablamos igual en una fiesta de amigos que en una actividad religiosa. Desde este punto de vista, lo que provoca el cambio es el grado de formalidad de las circunstancias. El grado de formalidad se entiende como la estricta observancia de las reglas, normas y costumbres en la comunicación lingüística.
Tomando en consideración este factor, los especialistas hablan de la existencia de diversos registros o estilos. De este modo, los enunciados “A los que estaban allí les entró risa cuando oyeron lo que les dijo el que hablaba” y “Las palabras emitidas por el conferenciante suscitaron la hilaridad del auditorio” difieren en su registro. Los hablantes, al momento de expresarse, deben elegir un registro adecuado a la circunstancia en que se encuentra.

No existe acuerdo en cuanto a cuántos y cuáles tipos de registros existen. Por lo general, se distinguen los siguientes: solemne, culto o formal, estándar, profesional, coloquial, vulgar y jergal.
En muchas regiones de América, el uso de los pronombres vos y usted se encuentran dentro de este tipo de variación, pues el primero se utiliza en contextos informales, mientras que el segundo se usa en situaciones formales. Así, todos somos susceptibles de ser interpelados con vos o con usted dependiendo del evento en que nos encontremos.
Los vulgarismos e idiotismos son a veces considerados como formas de estilo, al estar limitados a variaciones de léxico, mientras que los argots pueden ser incluidos tanto en el concepto de variedad como de estilo.
En sociolingüística se utilizan además, y entre otros, los siguientes términos, para diferenciar formas del habla que no son compartidas por el conjunto de los hablantes de un idioma o dialecto:
Argot : (la palabra es un galicismo empleado por «jerga») es el lenguaje específico utilizado por un grupo de personas que comparten unas características comunes por su categoría social, profesión, procedencia, o aficiones.             
Los argots se producen continuamente para nombrar aquello que carece de una traducción literal en la lengua normada, vigente en un determinado momento. La mayoría de estos argots acaban siendo aceptados como vocabulario propio de ese idioma o del grupo social.                                        
Los argots son un importante factor de cambio y renovación lingüística. En el pasado se asociaban a la expresión vulgar, poco culta. Desde el siglo XX las jergas y similares son objeto de estudio por los especialistas.
Cronolecto: variedad de un idioma o de un dialecto geográfico usada por un grupo etario, los cronolectos (especialmente entre los adolescentes) suelen tener características argotales. Los cronolectos más estudiados son el lenguaje infantil y el juvenil. En situaciones de cambio lingüístico, los cronolectos de diferentes grupos de edad pueden diferir bastante en rasgos que están en proceso de cambio.
Ecolecto: variedad de un idioma o dialecto utilizada por un número muy reducido de personas (por ejemplo, los miembros de una familia, de un grupo de amigos).
Etnolecto: variedad hablada por los miembros de una etnia, término muy poco utilizado, ya que, por lo general, se trata de un dialecto geográfico.
Geolecto: variedad de una lengua o dialecto hablada en una zona geográfica muy determinada, y sólo en esa zona. Por ejemplo el pixueto, dialecto del asturiano que sólo se habla en la villa de Cudillero, o el monegasco dialecto de la lengua provenzal, que sólo se utiliza en el Principado de Mónaco.
Idiolecto: variedad de la lengua hablada por una persona, es decir, el término se refiere al conjunto de peculiaridades que una persona usa sistemáticamente y en la que difiere del uso de los miembros de su comunidad lingüística.
Lengua sagrada: algunas etnias como los dogones, pueblo establecido en Malí y Burkina Faso (África), tienen dos lenguas, una de uso cotidiano y otra, secreta, para las ceremonias religiosas.
Sexolecto: conjunto de particularidades del habla, propias de los hombres o de las mujeres.
Sociolecto: conjunto de particularidades del habla típicas de una clase o de un estrato social.
Tecnolecto: conjunto de palabras y locuciones propias del lenguaje profesional.